El MV Explorer, conocido anteriormente como MS Lindblad Explorer, fue un crucero destinado al servicio en el Ártico y Antártico. Fue construido en los astilleros de Nystads Varv de Finlandia, sus dimensiones eran de 72,88 metros de eslora por 14 de manga y un desplazamiento de 2.398 toneladas.
El barco fue construido para mantenerse a flote con dos compartimentos llenos de agua. Se botó el 14 de diciembre de 1969.
El “Explorer” fue el primer barco de crucero diseñado expresamente para navegar por las aguas heladas del Océano Antártico, siendo el punto de partida del turismo polar que se experimenta hoy en día.
En sus comienzos, el MS Explorer era comandado por el explorador sueco Lars-Eric Lindblad. La propiedad del navío cambió varias veces desde su construcción, siendo su último propietario la empresa de viajes de Toronto G.A.P Adventures, que lo adquirió en 2004
El 11 de febrero de 1972 (1972) sufrió un incidente, al quedar encallado en la Antartida, sus pasajeros y tripulación fueron rescatados, siendo remolcado el barco a Buenos Aires (Argentina) y luego a Noruega para su reparación.
En 1994 el buque fue remodelado y rebautizado como MS Explorer.
En la madrugada del 23 de noviembre de 2007 cuando navegaba en las inmediaciones de la Isla Rey Jorge del archipiélago de las Shetland del Sur, el MS Explorer impactó con un objeto sumergido no identificado, que bien pudo ser un iceberg, el cual le causó una hendidura en su casco. Pasadas las 02:30 horas su capitán, el sueco Bengt Wiman dio la orden de abandonar el buque, no sin antes contactar con otros barcos de la zona informándoles de su situación. La mar estaba en calma y a pesar de que el buque comenzaba a escorarse peligrosamente la evacuación pudo realizarse con orden y sin problemas Los náufragos fueron recogidos, tres horas más tarde, por el crucero noruego “Nordnorge”, en operación coordinada con el Centro de Recate Chileno de Valparaíso.
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El MS Explorer acabó tomando una mayor escora hasta desaparecer de la superficie pasadas las 15:30 horas, en una zona donde la profundidad es de aproximadamente 1.100 metros.
Autor: Juan Carlos López